Monografía


Segundo Año

 
Siguiendo con el género académico, presentaré dos trabajos monográficos, en este caso realizados en forma individual.

Las monografías se hicieron en el marco de la Unidad Curricular Teoría Literaria II, en la Unidad de Contenido I: Crítica Literaria.


“Somos mucho más que dos”

Esta monografía se realizó a partir de la lectura de la obra “Orgullo y prejuicio” de Jane Austen y de reconstruir una primera aproximación al fenómeno literario descubierto a través de un sondeo bibliográfico. Dicho trabajo monográfico fue el punto de partida para luego poder escribir una crítica literaria aplicando el método temático. (En otro de los espacios seleccionados para este portafolio se desarrollará y explicará la Crítica Literaria).
 
 
Obra: AUSTEN, JANE, “Orgullo y prejuicio” (1813) 
 
Calificación del trabajo:
 
Les recomiendo ver la película “Orgullo y prejuicio”(2005), basada en la obra de Jane Austen.

 
 
 
“Sólo domina el iracundo Marte”
Por otro lado, “Sólo domina el iracundo Marte” fue una monografía en la que debíamos realizar una investigación sobre Alonso de Ercilla y su obra “La araucana”. Este trabajo fue  solicitado en el lapso de una semana, como una actividad,  cuando se estaba trabajando el método histórico de la crítica literaria que requiere la elaboración de una monografía para luego realizar la crítica.
 

 
Obra: DE ERCILLA, ALONSO,  “La araucana” (1569, 1578, 1589).
 
 
La experiencia de convertirme nuevamente en investigadora siempre me gustó. A la hora de estudiar una obra literaria, un tema específico, siempre trato de agotar todos los recursos, el internet es uno que no se agota nunca y al alumno le sirve mucho.  Poder ingresar en páginas confiables de universidades, revistas literarias, ensayos, estudios académicos sobre temas de interés para la formación, es un privilegio que tenemos en el presente.
Soy de esas personas que no me quedo con una sola bibliografía, necesito tener diversas miradas para analizar una temática y luego poder sacar mis propias conclusiones. Esta reflexión la hago en esta ocasión porque en las dos monografías recuerdo que estuve  muchos días frente a mi computadora leyendo los materiales encontrados, tomando ideas de diferentes académicos, aunque sea una palabra que me ayudó a mi estudio y esa es la satisfacción, al llegar al final del recorrido y encontrarte con tu propio trabajo. Poder decir: yo también lo logré.
Pero también están los momentos en que como investigador uno no sabe cómo seguir. Me pasó cuando por ejemplo debía cumplir con un requisito respecto a la cantidad de páginas. En la monografía de “Orgullo y prejuicio” no podía excederme las diez (sin contar el anexo), mientras que en el trabajo de “La araucana” la profesora nos dio la consigna que había hacerlo de un máximo de tres páginas. Eso me asustó, pero también me enseño a  tomar decisiones acerca de qué información quería que estuviese sí o sí, considerándola fundamental, cuál no era del todo esencial, como así también eliminar reiteraciones, resumir ideas, etc.
Concluyo que la monografía es uno de los géneros académicos que más me atrapa y que en mi futuro, como docente me gustaría enseñarlo y acompañar a mis alumnos en el proceso de escritura de esta práctica social.